Clasicismo tardío

Praxítelesateniense e hijo de escultor, parece haber sido el primero en explorar a fondo las posibilidades sensuales del mármol esculpido. El atractivo erótico de su Afrodita de Cnido—la primera estatua femenina completamente desnuda del arte griego— se hizo famoso en su tiempo, no por el escándalo de mostrar un desnudo femenino sino por mostrar a una diosa como un ser mortal, otra imagen de Afrodita que se le atribuye es la Venus de Arlesdel museo del Louvre. Su Hermes con el niño Dioniso del Museo Arqueológico de Olimpia, muestra su maestría en la representación de la suavidad de la piel, la sutileza de la expresión facial y la gracia flexible y sinuosa de la postura. 

Esta postura indolente apoyada en algún soporte, pose de la mayoría de sus esculturas, con lo que justificaba sus marcadas curvas de las caderas, es una de sus señas inconfundibles en sus obras.

 

Escopas natural de Paros fue conocido por el sentimiento del drama, la violencia, el dinamismo y la pasión con la que impregnó sus obras, se le atribuyó haber conseguido el «pathos» expresado especialmente en las caras de ojos hundidos y la boca entreabierta de sus esculturas, especialmente en las que realizó para el Mausoleo de Halicarnaso, considerada una de las más importantes construcciones arquitectónicas griegas durante este período, aunque en otras obras demostró su habilidad para retratar la paz y la armonía. Participó como arquitecto y escultor en el templo de Atenea en Tegea, donde realizó entre otras esculturas para sus frontones la cacería del Jabalí de Calidón, la lucha entre Aquiles yTelefo, también se le atribuye la Ménade furiosa del museo Albertinum de Dresde.


Lisipo natural de Sición, reformó el canon para la representación de la proporción del cuerpo humano, que anteriormente se había fijado por Policleto, en relación 1:7. Lisipo revisó el canon aumentándolo a siete cabezas y media, consiguiendo la figura más alargada. Empleó casi exclusivamente el bronce como material de sus obras. A él también se le atribuye la primera estatua, que se realizó con una terminación de vista en dirección circular de 360 grados, que permite al espectador apreciarla no sólo desde un punto de vista único y central, como hasta entonces se hacía. De esta obra el Apoxiomeno, se conserva una copia romana en mármol, la original era de bronce y representa a un joven atleta griego, quitándose la arena pegada a su cuerpo debido al sudor con un estrígil, que sólo usaban los hombres y principalmente los atletas: parecido a un rascador, se utilizaba para limpiarse el polvo, sudor y el aceite en exceso que se extendía por la piel antes de los concursos. Se le puede considerar como el escultor oficial de Alejandro Magno para el que realizó numerosas obras como el Heracles Epitrapezios y el Heracles Farnesio y algunos retratos del propio Alejandro.